El presente estudio a) estima el coste medio de un paciente con artrosis tratado durante 6 meses con condroitín sulfato (CS) o antiinflamatorios no esteroideos (AINE), y b) evalúa el impacto presupuestario para el Sistema Nacional de Salud que causaría la disminución del consumo de AINE con la administración en monoterapia o conjunta de CS.
Material y métodoModelo de minimización de costes que comparó ambos tratamientos (asumiendo igualdad de eficacia), a las dosis y las pautas recomendadas, durante un período de seis meses. Los datos utilizados en el modelo se obtuvieron del estudio VECTRA, un estudio retrospectivo en el que se recogieron el consumo de recursos sanitarios de 530 pacientes con artrosis tratados con CS o AINE. La eficacia y la incidencia de efectos adversos se estimaron a partir del metaanálisis de ensayos clínicos aleatorizados. Se hicieron análisis de sensibilidad simples univariantes del caso básico.
ResultadosEl coste semestral por paciente tratado con CS fue de 141 €, y de 182 € en el caso de los AINE. Esto significa que si durante los 3 próximos años el 5, el 10 y el 15% de los pacientes con artrosis tratados actualmente con AINE fueran tratados con CS, se generarían ahorros para el Sistema Nacional de Salud de más de 38,7 millones de euros durante este período. Además, por cada 10.000 pacientes tratados con CS en lugar de AINE se evitarían 2.666 efectos adversos gastrointestinales, de los que 90 serían graves. Los análisis de sensibilidad confirmaron la estabilidad del caso básico en todos los supuestos considerados.
ConclusionesComparado con los AINE, el CS es un tratamiento con menores costes y con mejor tolerancia gastrointestinal en el manejo de la artrosis.
Our aim was to investigate: a) the average cost per patient with osteoarthritis treated with chondroitin sulfate compared with NSAIDs for 6 months and b) the possible impact that the reduction NSAID use due to monotherapy with or combined administration of chondroitin sulfate treatment may have on the budget of the Spanish National Health System.
MethodsA cost-minimization model compared both treatments (efficacy equivalence assumption), used at the recommended doses and regimens during a 6-month period. Data used in the model was obtained from the VECTRA study, a retrospective study of 530 patients with osteoarthritis treated with chondroitin sulfate or NSAIDs that was conducted to determine the consumption of health care resources. The efficacy and incidence of adverse events was estimated from meta-analysis based on randomized clinical trials. Univariate sensitivity analysis was performed for the base case scenario.
ResultsThe overall 6-month cost per patient given chondroitin sulfate was 141 € compared with 182 € when treated with NSAIDs. If during the forthcoming 3 years, 5%, 10%, and 15% of patients currently treated with NSAIDs would gradually be replaced by treatment with chondroitin sulfate, the expected savings for the Spanish National Health System during these 3 years would be over 38,700,000 €. In addition, 2,666 cases of gastrointestinal adverse events (including 90 serious adverse events) will have been avoided for every 10,000 patients treated with chondroitin sulfate instead of NSAID. Sensitivity analysis confirmed the strength of base-case in all scenarios.
ConclusionsOn the basis of these findings, chondroitin sulfate is a treatment for osteoarthritis with a lesser cost and better gastrointestinal tolerability compared with NSAIDs.
La artrosis es una de las enfermedades reumáticas más frecuentes, que cursa con dolor, discapacidad física, dificultad en hacer las actividades cotidianas y, en consecuencia, disminuye la calidad de vida de los pacientes. El impacto económico y social de la enfermedad es sustancial, especialmente por la disminución en la calidad de vida del paciente, la pérdida de productividad y un incremento de los costes derivados del uso de recursos sanitarios1–3. Teniendo en cuenta las tendencias demográficas actuales, el aumento y el envejecimiento progresivo de la población y que la artrosis aparece predominantemente en la población anciana, es de esperar que la prevalencia de la artrosis aumente y que, por tanto, tenga implicaciones no solo a nivel de la sociedad en general, sino también con respecto al futuro del sistema sanitario. Por tanto, el análisis de los costes generados por la artrosis es un asunto cada vez de mayor importancia, primeramente porque la enfermedad es una de las mayores causas de incapacidad, tanto temporal como permanente, y además por su alta prevalencia en España, que se estima en un 10,2% de la población general (intervalo de confianza del 95%: 7,9–12,5)4, datos que coinciden con los registrados en otros países industrializados5–8.
Los objetivos en el tratamiento de la artrosis son aliviar el dolor, mejorar la discapacidad física y retrasar en lo posible la progresión del daño estructural de las articulaciones afectadas. Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son el tratamiento base de la artrosis, particularmente en los estadios iniciales de la enfermedad, pero generalmente los AINE se asocian a efectos adversos (EA) clínicamente relevantes. Una encuesta realizada en el Reino Unido con médicos de medicina general y con pacientes a los que se les preguntó su perspectiva de la artrosis9, reveló que la cuarta parte de los entrevistados estaban descontentos con su tratamiento y otra cuarta parte opinaban que su dolor estaba insuficientemente controlado. Una cuarta parte de los pacientes, además del tratamiento recetado por su médico, tomaba medicamentos que no precisaban prescripción, principalmente paracetamol o ibuprofeno. La mayoría de los médicos entrevistados en el estudio (92%) dijo que la seguridad a nivel gastrointestinal de los AINE era un motivo de preocupación a la hora de prescribir estos fármacos, un 24% afirmó prescribir dosis bajas de AINE con la esperanza de controlar el dolor sin la aparición de EA gastrointestinales (EAGI). Por otra parte, solo el 20% de los pacientes artrósicos a los que se les había recetado un AINE lo seguía tomando después de un año, siendo la aparición de EA la causa principal para interrumpir el tratamiento10. Considerando que no se recomienda el uso de AINE durante períodos largos de tiempo, como sería el caso de la artrosis, y que el riesgo de toxicidad gastrointestinal aumenta en tratamientos prolongados11, se han desarrollado estrategias terapéuticas alternativas al uso de AINE, como el condroitín sulfato (CS).
El CS es un importante componente estructural del cartílago y se clasifica dentro de los fármacos de acción lenta para el tratamiento sintomático de la artrosis, o symptomatic slow-acting drug for osteoarthritis (SYSADOA), estando aprobado como medicamento en varios países de Europa y como nutracéutico en Estados Unidos, entre otros países. Numerosos estudios han mostrado los beneficios clínicos del CS en la disminución del dolor y en la mejora de la capacidad funcional, en la reducción del consumo de AINE o de paracetamol cuando se toman conjuntamente y su buena tolerabilidad, además de su efecto remanente o carry-over tras la supresión del tratamiento12. Las recomendaciones para el tratamiento de la artrosis basadas en las evidencias clínicas, publicadas por sociedades como la European League Against Rheumatism13 y la Osteoarthritis Research Society International14, certifican también la eficacia y la buena tolerabilidad del CS para el tratamiento de la artrosis de rodilla.
El creciente coste de las terapias farmacológicas y sus EA ha motivado la demanda, cada vez mayor, de estudios económicos, especialmente los que comparan el coste de tratamientos con resultados similares (minimización de costes). A este respecto, realizar una evaluación económica que compare el CS con los AINE es pertinente y parece relevante para ampliar el conocimiento y maximizar el beneficio de los recursos sanitarios disponibles en el proceso para la toma de decisiones en el manejo de la artrosis. En un estudio medicoeconómico realizado en Francia15, la cantidad de AINE recetados se redujo en un 67% en los pacientes tratados con CS. El coste ocasionado por el CS se compensaba con una reducción en fisioterapia y con menos coprescripciones de fármacos gastroprotectores. En otro estudio observacional realizado en farmacias, el uso de AINE y de paracetamol disminuía significativamente en los pacientes que tomaban concomitantemente CS durante períodos largos de tiempo16. Otro estudio mostraba que el CS, usado por pacientes con artrosis durante más de 6 meses, inducía a una menor coprescripción de AINE comparados con los que usaban CS en períodos inferiores a 6 meses17. En un análisis farmacoeconómico realizado en España con diferentes tratamientos farmacológicos para el tratamiento de la artrosis, el CS resultó ser un tratamiento con menores costes y mejor tolerancia gastrointestinal que el ibuprofeno, el diclofenaco sódico, el celecoxib o el rofecobix18. Por el contrario, el presente análisis económico se diseñó para evaluar el uso de AINE y de CS en el tratamiento de la artrosis, utilizando datos de consumo de recursos sanitarios reales obtenidos a partir de un estudio retrospectivo denominado VECTRA (Valoración Económica y Sanitaria de Condroitín Sulfato para el Tratamiento de la Artrosis). Tuvo los siguientes objetivos concretos: a) comparar el coste medio estimado de un paciente con artrosis tratado durante 6 meses con CS y con AINE, respectivamente, y b) determinar el posible impacto presupuestario que tendría la reducción del consumo de AINE debido a la administración conjunta de CS en el Sistema Nacional de Salud (SNS).
MétodosDiseño del estudioA partir de un estudio retrospectivo en el que se comparó la eficiencia del tratamiento de la artrosis con CS o AINE (excluidos los inhibidores selectivos de la COX-2) o con la combinación de ambos tratamientos, se hizo un modelo farmacoeconómico, de minimización de costes (por tanto, partiendo de una asunción de similar eficacia), determinístico, mediante un árbol de decisiones (fig. 1), a las dosis y pautas recomendadas durante un período de seis meses (horizonte temporal). Este modelo simula la aparición de EA, en particular los gastrointestinales graves, así como las complicaciones derivadas de los tratamientos comparados. Las características del modelo farmacológico han sido descritas en estudios previamente publicados16,18,19. En la rama del CS se incluyó el porcentaje de pacientes que, a partir de un tratamiento previo con AINE, pasaron a ser tratados con CS o con la combinación de CS más AINE. El árbol de decisiones se diseñó con el programa TreeAge Pro 2006 Healthcare de TreeAge Software Inc (Williamstown, Massachusetts).
Árbol de decisiones del tratamiento de la artrosis y sus efectos con condroitín sulfato (CS) en comparación con antiinflamatorios no esteroideos (AINE). Un 24,0 y un 25,4% de los pacientes cambiaron de tratamiento a CS o a la combinación de CS con AINE, respectivamente, por falta de eficacia de los AINE. EA: efectos adversos; EAGI: efectos adversos gastrointestinales; GI: gastrointestinal.
El estudio se hizo desde la perspectiva del SNS, considerando sólo los costes directos sanitarios. El horizonte temporal considerado fue de seis meses.
Eficacia y efectos adversosSe hizo un análisis de minimización de costes al considerar que el CS y los AINE tienen una eficacia clínica comparable. Esta asunción se basa en un ensayo clínico aleatorizado, el único disponible que comparó la eficacia del CS y diclofenaco sódico20. Las probabilidades de eficacia clínica, los EA y de desenlace fatal a causa de la toxicidad durante los tratamientos con CS y AINE, simulados en el árbol de decisiones (tabla 1), se obtuvieron de ensayos clínicos doble ciego y aleatorizados, revisiones sistemáticas y metaanálisis publicados en la literatura médica20–28 por la Food and Drug Administration29, la Canadian Coordinating Office for Health Technology Assessment19 y el National Institute for Clinical Excellence30 La tasa anual de mortalidad por sexo y por edad se obtuvo del Centro Nacional de Epidemiología31.
Probabilidades del árbol de decisiones del tratamiento de la artrosis y sus efectos con condroitín sulfato en comparación con antiinflamatorios no esteroideos
Ítema | Tratamiento/edad | Probabilidad media | Probabilidad mínima | Probabilidad máxima | Referencias |
Porcentaje de pacientes con EA | CSb | 0,0941 | 0,0705 | 0,1176 | 21 |
AINEc | 0,5396 | 0,5200 | 0,5594 | 30 | |
Porcentaje de pacientes con EAGI | CSc | 0,0685 | 0,0514 | 0,0856 | 21 |
AINEc | 0,5060 | 0,5058 | 0,5210 | 29 | |
Tasas de eficacia | CS | 0,78 | 0,60 | 0,95 | 22 |
AINE | 0,83 | 0,80 | 0,87 | 27 | |
Porcentaje de pacientes con EAGI graves | CSd | 0 | 0 | 0 | 21 |
AINEc | 0,0329 | 0,0246 | 0,0411 | 19 | |
Porcentaje de complicaciones en pacientes con EAGI graves | CSd | 0 | 0 | 0 | 21 |
AINEc | 0,0099 | 0,0074 | 0,0123 | 19 | |
Mortalidad después de la 1.a hemorragia GI | Todos | 0,0430 | 0,0190 | 0,1100 | 19, 28 |
Mortalidad anual (ambos sexos)e | 50 años | 0,0064 | 0,0018 | 0,0046 | 31 |
60 años | 0,0073 | 0,0039 | 0,0106 | 31 |
AINE: antiinflamatorios no esteroideos; CS: condroitín sulfato; EA: efectos adversos; EAGI: efectos adversos gastrointestinales; GI: gastrointestinal.
Las probabilidades de efectos adversos son las observadas o estimadas después de 6 meses de tratamiento.
Los valores máximos y mínimos son±25% del valor medio. En otros casos, los valores máximo y mínimo corresponden al intervalo de confianza del 95%.
Los resultados combinados de todos los antiinflamatorios no esteroideos se estimaron, en el caso del efecto adverso gastrointestinal, los efectos adversos gastrointestinales graves y sus complicaciones se utilizó el promedio de los observados con naproxeno, diclofenaco e ibuprofeno19.
De acuerdo con el metaanálisis de Leeb21 con condroitín sulfato en monoterapia, se describieron efectos adversos gastrointestinales leves (27 de 394 pacientes [6,85%], de los cuales 18 fueron epigastralgias, 7 diarreas y 2 estreñimiento). No se han descrito efectos adversos gastrointestinales graves ni infarto de miocardio con condroitín sulfato.
Tasa de mortalidad anual (para ambos sexos) en intervalos de edad de 44–54 y de 55–64 años, respectivamente, observada en el año 2000; el límite inferior corresponde a la tasa de mortalidad en mujeres y la superior corresponde a la tasa de mortalidad en hombres. Se ha considerado que la mortalidad a seis meses es la mitad de la de un año.
La estimación de los costes del tratamiento de la artrosis con CS o con AINE se hizo mediante la identificación y la cuantificación de los recursos sanitarios que conllevan y, posteriormente, asignando a esos recursos unos determinados costes unitarios. De este modo, se estimaron los costes medios para un paciente tipo con artrosis que se tratara con CS o con AINE.
La «utilización de recursos sanitarios» se determinó mediante i) las probabilidades de aparición de EA, obtenidos de la revisión sistemática de la bibliografía, y ii) las probabilidades de cambio de tratamiento de AINE a CS o a la combinación de ambos, debido a EA o a falta de eficacia, así como el uso de recursos debido a los EA leves-moderados y el consumo de fármacos gastroprotectores que se obtuvieron del estudio VECTRA, cuyos resultados no han sido previamente publicados.
El estudio VECTRA fue un estudio retrospectivo, diseñado para estimar el porcentaje de pacientes con artrosis que tomaban CS junto con AINE y el consumo de recursos asociados a la disminución de estos últimos por el uso concomitante de CS. En el estudio VECTRA se incluyeron pacientes de ambos sexos, mayores de 18 años, con artrosis diagnosticada radiográficamente en cualquier articulación y que estuvieran siendo tratados con CS o con AINE. Para evitar sesgos, la selección de los pacientes se realizó de manera sistemática, tal y como se describe a continuación: por ejemplo, supongamos que un centro disponía de 30 pacientes con artrosis en tratamiento con AINE, estos debían ordenarse por su número de historia de menor a mayor, del 1 al 30. Para elegir el primer caso, se calcularía una constante de muestreo al azar (por ejemplo, k=n/5), siendo n los 30 pacientes indicados. Por tanto, el primer paciente sería el número 6 (30/5=6). Al número obtenido se le sumaría sucesivamente la constante de muestreo (k) hasta completar el tamaño muestral establecido. Por ejemplo, el segundo caso con AINE sería el 12 (6+6), el tercero sería el 18 (12+6), el cuarto sería el 24 (18+6) y el quinto sería el 30 (24+6).
Un total de 53 médicos, tanto de hospital como de atención primaria de toda España, con experiencia en el tratamiento de la artrosis aceptaron participar en el estudio. Se solicitó a cada médico participante en el estudio que revisara la historia clínica de 10 pacientes, 5 tratados con CS y 5 con AINE. Para cada paciente, el médico completó un cuestionario con los siguientes datos: datos demográficos y clínicos, tratamientos farmacológicos previos y actual, razones para cambiar la terapia a CS, consumo de recursos debido a EA leves-moderados y la coprescripción de agentes gastroprotectores.
Respecto a los «costes unitarios», el coste de los tratamientos de los EA causados por la terapia utilizada se determinó de acuerdo con el sistema de clasificación de los grupos relacionados por el diagnóstico (tabla 3). Los costes de los tratamientos de los EA gastrointestinales leves-moderados, incluyendo náuseas, vómitos, dispepsia, pirosis, dolor epigástrico y abdominal, diarrea, estreñimiento y úlcera péptica no complicada, se obtuvieron del estudio de Tarricone et al32. Respecto a los EA que no eran gastrointestinales y para obtener un coste estimado conservador, solamente se consideró la utilización de recursos en el tratamiento de la urticaria aguda en atención primaria33. Además, se calculó el coste semestral debido a la falta de eficacia de ambos tratamientos usados en monoterapia, lo cual implicaría una visita médica extraordinaria al médico de familia/especialista. Con este propósito, se consultó a un panel de nueve expertos clínicos el porcentaje de pacientes que consideraban podían recibir la combinación de ambos tratamientos cuando la monoterapia no era efectiva. Según su opinión, entre un 27–58% de los pacientes tomarían CS y AINE en combinación. La dosis y la duración máxima y mínima de los tratamientos durante 6 meses se obtuvieron de los datos del estudio VECTRA.
Resultados del estudio VECTRA. Características clínicas y recursos utilizados de 530 pacientes con artrosis tratados con condroitín sulfato, antiinflamatorios no esteroideos y condroitín sulfato+antiinflamatorios no esteroideos
Datos | CS | AINE | CS+AINE |
N (tratamiento actual) | n=233 | n=234 | n=63 |
Mujeres, % | 73,39 | 76,07 | 80,95 |
Edad, años, media (DE) | 59,29 (11,90) | 63,12 (11,30) | 62,03 (12,74) |
Peso, kg, media (DE) | 72,40 (10,78) | 73,38 (11,29) | 74,04 (14,24) |
Tiempo desde el diagnóstico, años, media (DE) | 3,92 (3,87) | 4,56 (4,28) | 4,56 (4,28) |
Localizaciones afectadas, media (DE)* | 1,70 (0,89) | 1,91 (1,01) | 2,35 (1,19) |
Intensidad del dolor, % de pacientes | |||
Leve | 19,82 | 6,11 | 1,75 |
Moderado | 61,26 | 68,56 | 68,42 |
Grave | 18,92 | 25,33 | 29,82 |
Tratamiento previo con AINE, % de pacientes | 51,50 | – | 42,86 |
Razones para el cambio de tratamiento de AINE a CS o CS+AINE, % de pacientes | |||
EA (todos) | 28,33 | – | 23,80 |
EAGI | 24,03 | – | 20,63 |
Otros EA | 6,44 | – | 3,17 |
Falta eficacia | 24,03 | – | 25,40 |
Agentes gastroprotectores, % de pacientes | 17,2 | 73,9 | 63,5 |
Uso de recursos debido a los EA leve-moderado relacionados con el tratamiento previo con AINE, % de pacientes | |||
Tratamiento farmacológico | 18,88 | – | 15,87 |
Visitas adicionales | 16,74 | – | 14,29 |
Admisión hospitalaria | 0,00 | – | 1,60 |
AINE: antiinflamatorios no esteroideos; CS: condroitín sulfato; DE: desviación estándar; EA: efectos adversos; EAGI: efecto adverso gastrointestinal.
Los costes de adquisición de los tratamientos se obtuvieron a partir de la base de datos del medicamento34. Los demás costes unitarios se estimaron a partir de una base de datos de costes sanitarios españoles35. Sólo se consideraron los costes médicos directos. Los costes unitarios y los costes semestrales estimados con CS y con AINE se resumen en la tabla 3. Todos los costes se expresan en euros del año 2007.
Costes unitarios y costes por proceso estimados (euros, 2007) después de 6 meses de tratamiento de la artrosis
Recurso | Coste unitario (€) | Valores considerados | Coste semestral (€) | Referencias |
Fármacos, dosis (formato) | ||||
CS por 400mg (60) | 19,37 | – | 116,22 | 34 |
AINEa | – | – | 56,64 | 34 |
Visita de reumatología (1) | 43,11 | – | – | |
Hospitalización en el servicio de reumatología (1 día) | 382,15 | – | – | 35 |
EAGI grave con complicacionesb | – | Mínimo | 1.598 | 35 |
Medio | 2.916 | 35 | ||
Máximo | 5.227 | 35 | ||
35 | ||||
EAGI grave sin complicacionesb | – | Mínimo | 944 | 35 |
Medio | 1.917 | 35 | ||
Máximo | 3.082 | 35 | ||
EAGI leve-moderadoc | – | – | 203 | 32 |
Otros EA no gastrointestinalesd | – | – | 105 | 33 |
AINE: antiinflamatorios no esteroideos; CS: condroitín sulfato; EA: efectos adversos; EAGI: efecto adverso gastrointestinal.
Coste calculado a partir de las tasas de utilización de antiinflamatorios no esteroideos en 129 pacientes del estudio retrospectivo (ibuprofeno, diclofenaco, aceclofenaco, meloxicam, naproxeno, piroxicam, indometacina, dexketoprofeno, dexibuprofeno, ketorolaco y lornoxicam).
Con complicaciones se consideró un coste promedio de los grupos relacionados por el diagnóstico (GRD) 174 (hemorragia gastrointestinal con complicaciones), 176 (úlcera péptica con complicaciones) y 180 (obstrucción gastrointestinal con complicaciones). Sin complicaciones se consideró el coste promedio de los GRD 175 (hemorragia gastrointestinal sin complicaciones) y 181 (obstrucción gastrointestinal sin complicaciones).
Utilización de recursos estimados a partir de los datos españoles del estudio de Tarricone et al32.
Coste estimado a partir de la utilización de recursos en el tratamiento de la urticaria aguda en atención primaria33.
Con estos datos, se calculó el impacto presupuestario que tendría la reducción del uso de AINE con CS para el SNS.
Caso básicoPara el «caso básico» del estudio se estableció una edad del paciente de 50 años, una duración del tratamiento de 6 meses, que el 50,6% de los EA con AINE fueran gastrointestinales29 y se aplicaron los valores medios de las probabilidades y de los costes; solo se consideraron los costes directos sanitarios.
Análisis de sensibilidadPara comprobar la estabilidad de los resultados del caso básico y la consistencia de las estimaciones efectuadas se hizo un «análisis de sensibilidad» simple univariante en el que se consideraron los siguientes escenarios: i) los cálculos se hicieron con los valores mínimos o máximos, tanto de las probabilidades como de los costes; ii) se consideró que el 80,2% de los EA de los AINE son gastrointestinales, conforme a lo observado en el estudio VECTRA; iii) se consideraron pacientes de 60 años, y iv) se consideró que en el caso de ineficacia de la monoterapia con CS o con un AINE pasarían a ser tratados con la combinación de CS y AINE entre un mínimo del 27% y un máximo del 58% de los pacientes.
ResultadosEstudio VECTRAEl estudio VECTRA incluyó a 530 pacientes con artrosis de toda España. La mayoría de los pacientes (65,3%) presentaron un dolor de intensidad moderada y el dolor del 23% de los pacientes fue de intensidad grave. Un total de 233 pacientes recibieron CS, 234 recibieron AINE y los 63 pacientes restantes tomaron CS más AINE conjuntamente para el tratamiento de su artrosis.
El 28,3 y el 23,8% de los pacientes cambiaron el tratamiento a CS o a la combinación de CS y AINE por la aparición de EA causados por los AINE (el 24,0 y el 20,6% tuvieron EAGI, respectivamente). Un 24,0 y un 25,4% de los pacientes cambiaron de tratamiento a CS o a la combinación de CS más AINE, respectivamente, por falta de eficacia de los AINE. El 17,2, el 63,5 y el 73,9% de los pacientes que tomaban CS, la combinación de CS y AINE más AINE solo, respectivamente, tomaban concomitantemente un agente gastroprotector (tabla 2).
Análisis de minimización de costesDe acuerdo con el «caso básico» del modelo, en una cohorte hipotética de 10.000 pacientes con artrosis tratados con CS en lugar de AINE se podría evitar un total de 2.666 EAGI (de los que 90 serían graves) (tabla 4).
Estimación de los efectos adversos que se evitarían en una cohorte de 10.000 pacientes con artrosis después de 6 meses de tratamiento con condroitín sulfato en comparación con antiinflamatorios no esteroideos. Caso básico
EA | CS | AINE | Casos evitados |
Gastrointestinales | 64 | 2.730 | 2.666 |
Gastrointestinales graves | 0 | 90 | 90 |
AINE: antiinflamatorios no esteroideos; CS: condroitín sulfato; EA: efectos adversos.
El coste semestral de un paciente tratado con CS fue de 141 € comparado con los 182 € en el caso de un paciente tratado con AINE (tabla 5). Los análisis de sensibilidad confirmaron la estabilidad del caso básico en todos los supuestos considerados (tabla 5). Asumiendo una disminución teórica del consumo de AINE como consecuencia del tratamiento conjunto con CS, del 5, el 10 y el 15% en los próximos 3 años, respectivamente, se generarían al cabo de estos tres años ahorros para el SNS Español de más de 38,7 millones de euros (tabla 6, fig. 2).
Coste de 6 meses de tratamiento de un paciente con artrosis con condroitín sulfato o con antiinflamatorios no esteroideos (euros, 2007)
Escenarios | CS | AINE | Diferencia de costesa |
Costes mediosb | 141 € | 182 € | −41 € |
Costes mínimosb | 141 € | 173 € | −32 € |
Costes máximosb | 141 € | 193 € | −52 € |
Probabilidades mínimasc | 154 € | 176 € | −22 € |
Probabilidades máximasc | 130 € | 189 € | −59 € |
80,2% de los EA de los AINE son gastrointestinalesd | 141 € | 207 € | −66 € |
Edad de 60 añose | 141 € | 182 € | −41 € |
Rescate mínimo con CS+AINE (27%) | 140 € | 182 € | −42 € |
Rescate máximo con CS+AINE (58%) | 143 € | 183 € | −40 € |
AINE: antiinflamatorios no esteroideos; CS: condroitín sulfato; EA: efectos adversos.
Los resultados negativos indican un ahorro con condroitín sulfato, los resultados positivos indican un ahorro con los antiinflamatorios no esteroideos.
Análisis del impacto presupuestario de la prescripción de condroitín sulfato en lugar de antiinflamatorios no esteroideos en el tratamiento de la artrosis para el Sistema Nacional Español de Salud
Ítem | Valor | Referencia |
Premisas del análisis | ||
N.ode unidades de AINE prescritas en España (año 2006) | 41.179.000 | 33 |
Porcentaje estimado de prescripciones en artrosis (año 2006) | 46,5 | 33 |
N.oestimado de unidades de AINE prescritas en artrosis (año 2006) | 19.148.235 | Calculado |
N.oestimado de dosis por unidad de medicamento prescrita | 20 (30; 40) | 33 |
N.opromedio de dosis prescritas en el SNS (año 2006) | 574.447.050 | Calculado |
N.oestimado de dosis de AINE por paciente y día | 1–2 | Estudio VECTRA |
N.oestimado de dosis de AINE por paciente y año | 365–730 | Calculado |
N.oestimado de pacientes tratados con AINE por artrosis (SNS) | 786.914–1.573.828 | Calculado |
Porcentaje estimado de sustitución de AINE por CS en artrosis | ||
Año 1 | 5 | Estimado |
Año 2 | 10 | Estimado |
Año 3 | 15 | Estimado |
N.ovalorado de pacientes estimados tratados con CS en sustitución de AINE | ||
1–2 dosis de AINE/día | 39.346–78.691 | Calculado |
Año 1 | 78.691–157.383 | Calculado |
Año 2 | 118.037–236.074 | Calculado |
Año 3 | ||
Resultados del análisis | ||
Coste medio anual del tratamiento de un paciente con artrosis (€) | ||
AINE | 364 | Calculado |
CS | 282 | Calculado |
Coste actual estimado por tratamiento de la artrosis con AINE (SNS) (€) | 572.873.222 | Calculado |
Coste proyectado con la sustitución de AINE por CS (SNS) (€) | ||
Año 1 | 566.420.530 | Calculado |
Año 2 | 559.967.837 | Calculado |
Año 3 | 553.515.144 | Calculado |
Coste neto (ahorros para el SNS) al 3.eraño (€) | 38.716.157 | Calculado |
AINE: antiinflamatorios no esteroideos; CS: condroitín sulfato; SNS: Sistema Nacional de Salud.
De acuerdo con los resultados del estudio VECTRA, y partiendo de una asunción de similar eficacia de los tratamientos comparados, tomada a partir del resultado del único ensayo clínico comparativo disponible20; el CS parece ser un tratamiento con menores costes y mejor tolerancia gastrointestinal para la artrosis que los AINE. A este respecto, es importante destacar las consecuencias de los fracasos por falta de eficacia o por la toxicidad de los AINE. De hecho, el 56,7% de los pacientes tratados con CS inició la terapia en sustitución del tratamiento con AINE; en el 54,4% de los casos, la sustitución del AINE se debió a EA (la mayoría a problemas gastrointestinales); el 69,5% de los pacientes con EA relacionados con el uso de AINE necesitaron consultas médicas adicionales, con un promedio de 2,2 consultas extras por paciente y, finalmente, el tratamiento con AINE fue asociado a un mayor uso concomitante de gastroprotectores (74%) en comparación con los pacientes tratados con CS (17%).
Los resultados del presente estudio corroboran los obtenidos previamente en un análisis farmacoeconómico español publicado en el año 2004 con un modelo similar18. Sin embargo, el consumo de recursos sanitarios se ha obtenido de un estudio retrospectivo con 530 pacientes españoles con artrosis, reforzando la fiabilidad de los resultados obtenidos.
En la valoración de los resultados del presente estudio debemos tener en cuenta las posibles limitaciones de este. En primer lugar, debe recordarse que se hizo una asunción fundamental para el planteamiento y el diseño del modelo: la relativa a la igualdad de eficacia de los tratamientos comparados. A nuestro juicio, esta suposición es la más plausible teniendo en cuenta los resultados del único estudio comparativo entre CS y diclofenaco sódico20. Para intentar minimizar la variabilidad de las estimaciones efectuadas, a cada valor medio (de probabilidad de toxicidad o de coste) se le asignaron sus correspondientes valores mínimo y máximo (intervalo de confianza del 95%: o±25% del valor medio) para evaluar las posibles repercusiones de los valores extremos sobre las suposiciones del caso básico. Por otra parte, debe tenerse en cuenta que la limitada duración de los ensayos clínicos solamente permitió una simulación fiable de los resultados a corto plazo (6 meses), por lo que no fue posible detectar efectos relevantes de los tratamientos sobre la supervivencia a largo plazo.
El estudio VECTRA no se diseñó para detectar EA, por lo que este dato se obtuvo de revisiones sistemáticas y metaanálisis publicados en la literatura médica20–28, así como de los realizados por la Food and Drug Administration29, la Canadian Coordinating Office for Health Technology Assessment19 y el National Institute for Clinical Excellence30. Se asumió que la población del estudio VECTRA sería similar a la población general analizada en los metaanálisis, teniendo en cuenta el proceso de selección de los pacientes y la amplia distribución de los investigadores en el territorio nacional.
Finalmente, una debilidad del estudio reside en el hecho de que la asunción de similar eficacia del CS y de los AINE está basada en un solo ensayo clínico aleatorizado en el que se comparó su eficacia con la del diclofenaco sódico20.
De acuerdo con los resultados del presente modelo, el CS resulta ser un tratamiento de la artrosis con menores costes y mejor tolerancia gastrointestinal que los AINE. La disminución del consumo de AINE con el cotratamiento con CS podría generar ahorros para el SNS de más de 38,7 millones de euros al cabo de tres años y, lo que es más importante, por cada 10.000 pacientes tratados con CS en lugar de AINE se evitarían 2.666 EAGI, de los que 90 serían graves.
Otros estudios han puesto de manifiesto que el uso de CS para el tratamiento sintomático de la artrosis disminuye el consumo de AINE, con la consiguiente reducción de los posibles EA asociados a estos15–17. Es de particular interés el estudio de Lagnaoui et al16, en el que se observó que la reducción en el consumo de AINE está relacionada con la duración del tratamiento con CS, siendo mayor en los pacientes que usaban CS en períodos de tiempo prolongados. Este resultado fue corroborado en el estudio de Taieb et al17, en el que se constató que el tratamiento prolongado con CS reduce no solamente las coprescripciones de AINE y analgésicos, sino también la duración de estos tratamientos. El estudio VECTRA destaca las consecuencias, tanto sanitarias como económicas, de los fracasos por falta de eficacia o por toxicidad de los AINE, así como la reducción de la incidencia de EA y los ahorros que estarían asociados a la utilización de CS en sustitución de los AINE.
Los resultados del presente estudio deberían ser confirmados en un ensayo clínico pragmático y aleatorizado que comparase directamente la eficacia, la tolerancia y la utilización de recursos sanitarios con las diferentes alternativas terapéuticas para el tratamiento de la artrosis36. Mientras tanto, según los resultados obtenidos, puede afirmarse que CS es un tratamiento de la artrosis con menores costes y mejor tolerancia gastrointestinal que los AINE.
Álvarez de Cienfuegos Rodríguez, A. Reumatólogo. Hospital Vega Baja. Orihuela. Alicante.
Amigo Díaz, ME. Reumatóloga. Hospital Xeral-Calde. Lugo.
Bernad Pineda, M. Reumatólogo. Hospital Universitario de la Paz. Madrid
Cansino Muñoz-Repiso, D. Traumatólogo. Hospital NISA Sevilla-Aljarafe. Sevilla.
Caracuel Ruiz, MA. Reumatólogo. Hospital Reina Sofía. Córdoba.
Centelles Portella, M. Reumatóloga. Hospital de Mataró. Barcelona.
Cifuentes Albeza, A. Rehabilitador. Hospital General de Elda. Alicante.
Conesa Mateos, A. Reumatóloga. Hospital Universitario Sagrat Cor. Barcelona.
Corts Giner, JR. Reumatólogo. Hospital Clínico Universitario de Valencia. Valencia.
Cowalinsky Millan, JM. Reumatólogo. Instituto de Reumatología Dr. Cowalinsky. Barcelona.
De Prada Espinel, JJ. Rehabilitador. Hospital Universitario del Río Hortega. Valladolid.
De Toro Santos, FJ. Reumatólogo. Complexo Hospitalario Juan Canalejo. A Coruña.
Del Castillo Montalvo, MR. Reumatóloga. Hospital de Guadalajara. Guadalajara, Madrid.
Gálvez Muñoz, J. Reumatólogo. Hospital General Universitario José María Morales Meseguer. Murcia.
Giménez Basallote, S. Médico de Familia. Centro de Salud del Limonar. Málaga.
Girona Quesada, E. Reumatólogo. Hospital Universitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de Gran Canaria.
González Gómez, ML. Reumatóloga. Hospital del Escorial. El Escorial, Madrid.
González Puig, L. Reumatóloga. Hospital Universitario la Fe. Valencia.
Haro Martínez, JP. Rehabilitador. Hospital San Agustín. Linares. Jaén.
Hernández del Río, A. Reumatóloga. Hospital Arquitecto Marcide/Novoa Santos. Ferrol. A Coruña.
Hidalgo Santiago, JC. Médico de Familia. Centro de Salud San Telmo. Jerez de la Frontera. Cádiz.
Juan Mas, A. Reumatólogo. Hospital Son Llàtzer. Palma de Mallorca.
Juanes de la Peña, A. Médico de Familia. Centro de Salud Santa Marta de Tormes. Salamanca.
Medrano San Ildefonso, M. Reumatóloga. Clínica Quirón. Zaragoza.
Mengíbar Torres, FJ. Reumatólogo. Grup Policlínic. Barcelona.
Molés Gimeno, JD. Medicina del Deporte. Consorcio Hospitalario Provincial de Castellón. Castellón.
Möller Parera, I. Reumatóloga. Instituto Poal de Reumatología/Hospital Platón. Barcelona.
Monfort Faure, J. Reumatólogo. Hospital del Mar. Barcelona.
Nacher Miguel, F. Rehabilitador. Vallès Rehabilitació. Sabadell, Barcelona
Núñez Iglesias, LA. Médico de Familia. Centro de Salud Esteiro, Esteiro. A Coruña.
Oñate García, D. Rehabilitador. Centro de Salud Leioa. Vizcaya.
Pallarés Oros, B. Traumatólogo. Clínica Girona. Girona.
Paredes González Albo, S. Reumatóloga. Hospital Sant Joan de Reus, Tarragona.
Reneses Cesteros, S. Reumatóloga. Hospital Universitario Virgen del Rocío. Sevilla.
Riestra Noriega, JL. Reumatólogo. Hospital Universitario Central de Asturias. Oviedo.
Rodríguez Heredia, JM. Reumatólogo. Hospital Universitario de Getafe. Getafe, Madrid.
Roig Vilaseca, D. Reumatólogo. SAP Baix Llobregat Centre. Cornellà de Llobregat, Barcelona.
Román Ivorra, JA. Reumatólogo. Hospital Universitario Dr. Peset. Valencia.
Rosas Romero, A. Reumatólogo. Hospital Universitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de Gran Canaria.
Salom Terradez, JR. Rehabilitador. Hospital Universitario Dr. Peset. Valencia.
Sánchez Castaño, JM. Rehabilitador. Hospital Universitario Virgen de las Nieves. Granada.
Sánchez Nieva, G. Reumatólogo. Complejo Hospitalario Universitario de Albacete.
Soler Gutierrez, T. Traumatólogo. Hospital Universitario de Getafe. Getafe, Madrid.
Sufrate Simón, D. Traumatólogo. Hospital San Millán. Logroño.
Torre Alonso, JC. Reumatólogo. Hospital Monte Naranco. Oviedo.
Trabado Vila, MC. Médico de Familia. Centre d’Especialitats Numància. Barcelona.
Trigueros Carrero, JA. Médico de Familia. Consultorio de Cuerva. Toledo.
Vivanco Panadero, JC. Traumatólogo. Hospital La Princesa. Madrid.
VECTRA es la sigla de «Valoración Económica y Sanitaria de Condroitín Sulfato para el Tratamiento de la Artrosis».