La reumatología es la especialidad dedicada a las enfermedades médicas del aparato locomotor. Incluye a las conectivopatías, artropatías inflamatorias, enfermedades del metabolismo óseo y los reumatismos de partes blandas. La importancia de las enfermedades del aparato locomotor viene avalada por un estudio reciente que pone de manifiesto la carga global mundial de estas enfermedades1, siendo las enfermedades musculoesqueléticas una de las 3 principales causas de morbimortalidad junto a los trastornos mentales y las enfermedades endocrinas. Un tercio de la población mundial general presenta alguna enfermedad reumática, por lo tanto, es importante determinar cuál es el número de reumatólogos que trabajan en Cataluña y cuáles son sus condiciones asistenciales y laborales en la actualidad. Hasta el momento, se han realizado 3 estudios con el objetivo de conocer la situación de la asistencia reumatológica en Cataluña2–4, tanto en el ámbito hospitalario como en la asistencia primaria. La Societat Catalana de Reumatologia (SCR) promueve este tipo de estudios, para mejorar la calidad de la asistencia al paciente con enfermedades médicas del aparato locomotor.

El objetivo del presente estudio es determinar el estado actual de la reumatología en Cataluña y valorar el cambio respecto a los estudios previos realizados por la propia SCR.

Se realizó un estudio observacional, descriptivo y transversal, con recogida de datos desde el 1 de febrero del 2012 al 30 de abril del 2012. La muestra objeto del estudio fueron los reumatólogos que ejercen actividad asistencial en Cataluña. Se obtuvo información mediante el listado de socios de la SCR y el listado de centros hospitalarios incluidos en el Servei Català de la Salut (SCS). El SCS incluye los centros del Institut Català de la Salut y los centros concertados por Xarxa Hospitalària d’Utilització Pública.

Se contactó telefónicamente con todos los centros hospitalarios solicitando el número de reumatólogos y el modo de contacto (preferiblemente correo electrónico). Se consiguieron 143 correos electrónicos de reumatólogos. Posteriormente. se contactó. mediante correo electrónico. enviando una carta de presentación y el cuestionario a todos los socios de la SCR y a los correos electrónicos obtenidos por contacto telefónico. El correo se reenvió en 3 ocasiones para aquellos que no contestaban.

Se diseñó un cuestionario que incluía las siguientes variables: nombre del centro y dirección, número de reumatólogos del centro, acreditación para la formación de especialistas y número de ellos, disponibilidad de enfermería especializada en reumatología, jubilaciones recientes, recesión de contratos durante el periodo 2010-2012, nombre y apellidos del reumatólogo, fecha de nacimiento, título de especialista en reumatología, año y vía de obtención —oposición anual estatal de Médicos Internos Residentes (MIR) u otras vías—, tipo de actividad profesional (hospitalaria, primaria o privada), grado de dedicación a la actividad reumatológica pública (completa > 30 h/semana, parcial < 30 h/semana) y tipo de contrato profesional (fijo, interino, eventual u otros).

Se obtuvo información acerca del número de habitantes de las diferentes regiones sanitarias de Cataluña mediante el Pla de Salut de Catalunya (2011-2015) publicado por el Departament de Sanitat y el IDESCAT (anuario estadístico de Cataluña). En la actualidad Cataluña es una comunidad autónoma con una población estimada de casi 7 millones y medio de habitantes.

Se obtuvo información acerca de 138 facultativos que ejercían como reumatólogos en Cataluña. Seis (4%) facultativos ejercían únicamente en el sector privado, uno se encontraba inscrito en el paro y uno se dedicaba exclusivamente a la investigación.

Ciento treinta (94%) médicos (62 varones/68 mujeres con una edad media ± desviación estándar de 47±9 años) ejercían actividad reumatológica en el sector público. En la figura 1 se muestra la distribución etaria.

Figura 1.

Distribución por edad de los reumatólogos en Cataluña durante el periodo de febrero a abril del 2012.

(0,07MB).

La obtención del título de especialista en reumatología fue en 114 (87,7%) casos a través de la vía MIR y en 16 (12,3%) a través de otras vías.

La asistencia en reumatología se ejercía de la siguiente manera: 75 (57,7%) médicos trabajaban en el ámbito hospitalario, 5 (3,8%) en la atención primaria y 50 (38,5%) en ambos. Ciento diez (84,6%) facultativos realizaban una dedicación completa (más de 30 h/semana) y 20 (15,4%) una dedicación parcial. Setenta y ocho (60%) reumatólogos también ejercían de reumatólogos en el sector privado.

El tipo de contrato laboral fue: 105 (80,8%) fijos, 9 (6,9%) interinos, 2 (1,5%) eventuales y 14 (10,8%) con otro tipo de contrato, entre los que se incluían becas, sustituciones y comisiones de servicios, entre otros.

Se disponía de enfermería reumatológica únicamente en 17 centros (33%), en 3 casos con una dedicación a tiempo parcial. En 2 hospitales se dispone de una auxiliar de enfermería.

En el bienio 2010-2012 se han producido 7 jubilaciones, 3 de ellas se han sustituido totalmente, una se ha cubierto en un 50%, en un caso se han perdido 8 h semanales y en 2 casos se ha producido la amortización de la plaza. En el mismo periodo se han producido 9 recesiones de contrato, 8 de ellos en la región sanitaria de Barcelona y uno en la región sanitaria de Cataluña central. Tres servicios de reumatología se han visto afectados por expedientes de regulación de ocupación en el último año.

Respecto a la distribución territorial, 102 (78,4%) médicos ejercían en la provincia de Barcelona, 11 (8,5%) en la provincia de Tarragona, 10 (7,7%) en la provincia de Girona y 5 (3,8%) en la provincia de Lleida. Dos (1,6%) reumatólogos ejercían en 2 provincias simultáneamente. En la tabla 1 se detalla el número de habitantes por reumatólogo distribuido por provincias.

El SCS incluye 59 centros hospitalarios, 37 (62,7%) disponen de reumatólogos con dedicación completa, además de parcial en algunos casos, y 15 (25,4%) disponen de reumatólogos únicamente con dedicación parcial. En 7 (11,9%) hospitales no ejercía ningún reumatólogo. En la tabla 2 se enumeran los centros hospitalarios que no disponían de reumatólogo.

En cuanto a la atención primaria, existen 3 centros de atención primaria que disponían de un reumatólogo propio (CAP Numancia en Barcelona, CAP Güell en Girona y CAP Nova Lloreda en Badalona). El resto de centros disponían de reumatólogos que trabajaban mayoritariamente en los centros hospitalarios y que se desplazaban a los centros de atención primaria.

Ocho hospitales estaban acreditados por la Comisión Nacional de la Especialidad de reumatología para la formación de reumatólogos mediante el programa MIR. El número de residentes acreditados en cada hospital es variable. Uno de los hospitales está actualmente acreditado pero aún no ha formado ningún reumatólogo. En la tabla 3 se reflejan los centros acreditados para la formación de especialistas en reumatología mediante el programa MIR y el número de ellos por año, en el momento del estudio.

El presente estudio describe el estado de la reumatología en su actividad asistencial en Cataluña, durante el periodo de febrero a abril del 2012.

Se objetiva que el número de reumatólogos que en la actualidad ejercen en el sector público de Cataluña es de 130, con un aumento respecto el estudio previo realizado en 2005 de únicamente 6 reumatólogos (5%). Cabe destacar que el aumento previo durante el periodo comprendido entre 1997 y 2005 fue del 40% y durante el periodo 1990-1997 el aumento fue del 20%.

Un dato muy llamativo del presente estudio es la existencia de 7 hospitales que no disponen aún de reumatólogo. Si analizamos este dato en relación con los resultados de los estudios previos, observamos que se ha reducido el número de hospitales sin reumatólogo. En el año 1990, 18 hospitales no disponían de un reumatólogo, en 1997 el número disminuyó a 13 hospitales y en el año 2005 10 hospitales seguían sin reumatólogo. Los datos actuales nos permiten afirmar que de los 7 hospitales que aún no disponen de reumatólogo 3 de ellos están localizados en la provincia de Girona, lo que pone de manifiesto que no existe una distribución homogénea de reumatólogos en Cataluña.

En el año 2012, la población de Cataluña se estimó en 7 millones y medio de habitantes, con lo que obtenemos aproximadamente una tasa de 1,7 reumatólogos por cada 100.000 habitantes. Según el último estudio de «Oferta y necesidad de especialistas médicos en España 2010-2015»5, publicado por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, en España se establece una tasa de 1,3 reumatólogos por cada 100.000 habitantes. Ambas tasas están por debajo de los estándares de calidad asistencial en reumatología6 que recomiendan un reumatólogo por cada 40.000-50.000 habitantes. La Sociedad Aragonesa de Reumatología publicó en 2010 una descripción del estado de la reumatología en dicha comunidad autónoma, en la que se concluía, también, que hay una insuficiente dotación de reumatólogos en todos los sectores sanitarios del Servicio Aragonés de Salud, estando en todos los casos por debajo de los estándares de calidad recomendados7.

En un estudio similar realizado por el Royal College of Physicians en 20098, se recomienda un reumatólogo por cada 86.000 habitantes. En este estudio, se obtuvieron datos de 531 reumatólogos y una tasa de un reumatólogo por cada 114.831 habitantes, con un valor de la media de la edad igual en nuestra población (47 años) pero con marcadas diferencias respecto al género, siendo en el caso del estudio británico de 70% hombres y el 30% mujeres. En nuestro estudio, se observa que por primera vez en Cataluña el número de mujeres reumatólogas supera al número de hombres reumatólogos (62 varones/68 mujeres).

En relación con la edad de los reumatólogos, se observa un aumento del valor de la media de la edad de los reumatólogos, siendo en la actualidad de 47 años, y en el estudio realizado en el año 2005 fue de 45 años. Este aumento puede atribuirse a múltiples razones y además verse agravado por la poca información que existe sobre los reumatólogos jóvenes (menores de 35 años), que actualmente, debido a la situación económica actual, tienen pocas opciones de conseguir un contrato laboral, han tenido que emigrar a otros países o han repetido el MIR para acceder a otras especialidades.

El aumento de la edad de los reumatólogos es un dato preocupante y debe tenerse en cuenta en las estrategias futuras. A modo de referencia, en Estados Unidos, el valor de la media de la edad de los socios del American College of Rheumatology es de 56 años9. Se prevé una falta de reumatólogos, basándose en la evaluación de la oferta y la demanda, en las próximas décadas10.

La vía de obtención del título de especialista en reumatología actualmente es a través del sistema MIR en el 100% de los casos, quedando las otras vías posibles relevadas a los reumatólogos mayores de 45 años. Este tipo de oposición ofertó, en la convocatoria del año 2012, 54 plazas de reumatología en toda España, 10 de ellas en Cataluña y todas ellas en la provincia de Barcelona.

La asistencia en reumatología se realiza mayoritariamente en los hospitales, aunque se ha doblado el número de reumatólogos que realizan asistencia hospitalaria y ambulatoria a la vez, y ha disminuido el número de reumatólogos que realizan únicamente asistencia ambulatoria. El tipo de contrato con el que se ejerce la actividad asistencial reumatológica se distribuye en un 80% de contratos fijos, 7% interinos, 2% eventuales y 11% otros. En relación con los resultados observados en los estudios previos se observa un aumento de los contratos fijos.

Solo se dispone de enfermería en el 37% de los hospitales. Los estándares de calidad de la Sociedad Española de Reumatología recomiendan que en cada unidad de Reumatología debiera haber una consulta de enfermería y que es recomendable una enfermera por cada 3 consultas médicas y un auxiliar por cada 2 consultas médicas.

Estas recomendaciones están muy alejadas de la realidad. En el estudio realizado por la Sociedad Aragonesa de Reumatología no se disponía de consulta de enfermería en ninguno de los sectores sanitarios. En la unidad de Reumatología del Hospital San Juan de Alicante, se realizó un estudio para valorar la actividad de enfermería especializada y se concluyó que se ahorraba tiempo, número de visitas médicas y que los pacientes percibían un mayor control de seguimiento de su enfermedad11. Diversos estudios europeos también avalan este hecho12–14 y la EULAR15 ha realizado unas recomendaciones para definir el papel de la enfermería especializada en el seguimiento de las enfermedades inflamatorias.

Otro aspecto que llama la atención son las diferencias en el crecimiento de los servicios de Reumatología en los diferentes hospitales; algunos doblan el personal respecto al estudio previo realizado en 2005, mientras que otros permanecen estancados. Este hecho se debe, en su mayor parte, a los efectos de la crisis económica actual. Determinadas plazas de jubilaciones se han amortizado (se han perdido 2 plazas de reumatología), se han producido recesiones de contratos (en 9 casos y la mayoría en la provincia de Barcelona), se han realizado expedientes de regulación de empleo y en la actualidad es muy difícil la producción de contratos nuevos.

La recogida de los datos se ha realizado durante un periodo limitado a 3 meses para evitar efectos adicionales que pudieran presentarse durante la realización del estudio. Aún así el estudio presenta ciertas limitaciones básicamente debido a que no existe un censo completo de reumatólogos con actividad en el sector público de Cataluña. A pesar de que la mayoría de los reumatólogos son socios de la SCR, no siempre es así y no ha sido posible contactar con todos los reumatólogos, sobre todo con algunos más jóvenes que tienen contratos de sustitución o de becario. Otra limitación del estudio deriva de la propia metodología de análisis. En la realización de los cálculos, tanto los reumatólogos a dedicación completa como los reumatólogos a dedicación parcial se han contabilizado como una unidad. Los reumatólogos que trabajan en diferentes regiones sanitarias se han contabilizado también como una unidad en cada región (p. ej., 2 veces) y los que trabajan en más de un centro dentro de la misma región solo se han contado una vez.

El presente estudio pone de manifiesto una estabilización de la reumatología en Cataluña. Preocupa, en cierta manera, el escaso crecimiento este último año, así como el aumento de edad de los reumatólogos. La asistencia de la reumatología en Cataluña no es equitativa, existiendo aún hospitales públicos o concertados sin reumatólogo, inclusive en capitales de provincia como en Girona.

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.