La tuberculosis diseminada es un proceso que suele afectar a pacientes inmunodeprimidos. Su manifestación inicial como fascitis necrosante es excepcional, sobre todo si no se asocia a tuberculosis ósea. El diagnóstico de esta rara complicación requiere un alto índice de sospecha por parte del clínico y el aislamiento del Mycobacterium tuberculosis en el tejido muscular, ya que los síntomas pueden remedar a la enfermedad de base, por lo que la biopsia muscular se presenta como la principal herramienta diagnóstica. Presentamos el caso de un paciente que recibía terapia inmunodepresora por síndrome nefrótico asociado a nefropatía por cambios mínimos y que desarrolló esta rara complicación, donde el diagnóstico se hizo basándose en los hallazgos de la biopsia muscular. También se realiza una revisión de los casos similares encontrados en la literatura médica.
Disseminated tuberculosis is a process that mainly affects immunocompromised hosts. Its initial appearance as necrotising fasciitis is exceptional especially if it is not associated to a bone disorder. The diagnosis of this rare complication requires a high degree of suspicion and the evidence of Mycobacterium tuberculosis in the muscular tissue, since the symptoms may mimic the underlying illness itself, for this reason the most sensitive method for demonstrating tuberculous infection is a muscular biopsy. Here we present the case of a patient who was receiving immunosuppressant therapy for nephrotic syndrome by minimal lesion glomerulonephritis and who developed this rare complication, where diagnosis was made by muscular biopsy. So we do a review of similar case reports in the literature.