Se presenta el caso de un varón de 51 años diagnosticado de artritis psoriásica poliarticular y con afectación ungueal en el año 2011. Refractaría al tratamiento con antiinflamatorios no esteroideos (AINE) y fármacos modificadores de la enfermedad (FAME) sintéticos (metotrexato 25mg/semana y salazopirina 500mg/8h) se decidió iniciar terapia biológica (TB) con fármacos inhibidores del factor de necrosis tumoral (anti-TNF), siguiendo las recomendaciones EULAR.
Como primera TB se optó por adalimumab, pero tras 2 años de tratamiento, la actividad de la enfermedad era moderada (DAS28-VSG=3,70. Tres articulaciones dolorosas y 3 articulaciones tumefactas=4.° metacarpofalángica [MCF] derecha, 3.° MCF izquierda y rodilla izquierda), apareciendo además, una dactilitis dolorosa en el cuarto dedo de su pie derecho (fig. 1) Por esta razón, se inicia tratamiento con etanercept. Sin embargo, tras 6 meses de tratamiento persistía una alta actividad inflamatoria (DAS28-VSG=5,80. Cuatro articulaciones dolorosas y 4 articulaciones tumefactas: 4.° MCF derecha, 3.° MCF izquierda y ambas rodillas). Se inició entonces, certolizumab pegol, que se mantuvo durante 6 meses y con el que tampoco se consiguió control de la actividad inflamatoria (DAS28-VSG=4,89. Cuatro articulaciones dolorosas: 4.° MCF derecha, 3.° MCF izquierda, 4.° interfalángica proximal [IFP] izquierda y rodilla izquierda, y 3 articulaciones tumefactas: 4.° MCF derecha, 3.° MCF izquierda y rodilla izquierda) ni resolución de la dactilitis.
Ante el fracaso terapéutico con 3 fármacos anti-TNF alfa, se decidió iniciar tratamiento con ustekinumab. Tras 2 dosis de ustekinumab, se consiguió una resolución completa de la dactilitis, una mejoría significativa de la afectación ungueal (fig. 2), y mejor control de la actividad inflamatoria articular (DAS28-VSG=3,50. Dos articulaciones dolorosas y 2 articulaciones inflamadas: 4.° IFP izquierda y rodilla izquierda).
Ustekinumab es un anticuerpo monoclonal, inhibidor de la subunidad p40 de IL-12/IL-23, que ha demostrado ser eficaz en todos los dominios de la artritis psoriásica1,2,3.
La importancia de este caso clínico radica en la rápida resolución de la dactilitis con ustekinumab, a pesar que había sido refractaria a 3 fármacos anti-TNF4,5. Esta increíble mejoría puede corroborar la importancia de la IL-23 en el desarrollo de la dactilitis y la relevancia de su inhibición para el tratamiento de este dominio.
Responsabilidades éticasProtección de personas y animalesLos autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datosLos autores declaran que han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre la publicación de datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informadoLos autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.