La infección protésica de rodilla por Mycobacterium tuberculosis (MT) es rara1,2. Revisiones del 2011 y el 2013 encontraron 7 y 15 casos de infecciones protésicas por MT, respectivamente3-5. Desde la introducción de terapias biológicas para el tratamiento de artritis reumatoide (AR), se ha visto un incremento en la incidencia de infección por MT, principalmente con los antagonistas del factor de necrosis tumoral (anti-TNF)6,7. Un estudio mostró una tasa de infección por MT de 49 por 100.000 personas-año en pacientes con AR en tratamiento con anti-TNF frente a un 8,7 en pacientes con AR6,7. A continuación, presentamos un caso de infección protésica por MT en una paciente con AR en tratamiento con anti-TNF.
Mujer de 77 años, con AR con metotrexato 7,5mg/semanal e infliximab (IFX) 3mg/kg, portadora de prótesis de rodilla derecha. En marzo del 2012 presentó tos, sudoración nocturna y febrícula de 2 meses de evolución; se solicitaron BK y cultivo de esputo, ambos negativos. En mayo recibió IFX y en junio acudió a su revisión refiriendo múltiples infecciones respiratorias durante ese tiempo. En agosto fue valorada por Traumatología por fiebre, dolor e hinchazón de la rodilla derecha; dada de alta con sospecha de infección protésica (fig. 1 A). En noviembre, ingresa en Medicina Interna (MI) por suboclusión intestinal y fue dada de alta con prednisona 15mg/día; durante el ingreso se realizó una tomografía axial computarizada (fig. 1 B), observándose un nódulo pulmonar indicativo de granuloma y adenopatías en tórax y retroperitoneales. En enero del 2013 acudió a Reumatología por dolor en rodilla, suspendiéndose el IFX; además, fue valorada por MI, que indicó cirugía por persistencia del cuadro suboclusivo. En abril, ingresa en Cirugía General para intervención quirúrgica. El estudio anatomopatológico mostró linfadenitis granulomatosa necrosante e inflamación granulomatosa necrosante con ulceración de la mucosa en el intestino delgado; el estudio microbiológico para Mycobacterium fue negativo. Se inició Rifater® y se realizó QuantiFERON®, que fue negativo. En junio, acudió a Reumatología por edema en la pierna y dolor en la rodilla derecha; se realizó una ecografía Doppler, observándose una masa quística de 10cm, la cual fue drenada y analizada; además, se solicitó una resonancia magnética (fig. 1 D). La PCR del líquido drenado fue positiva para Mycobacterium tuberculosis complex. Durante este periodo, la paciente presentó reactantes de fase aguda levemente altos; además, Traumatología realizó una gammagrafía, sugestiva de infección periprotésica (fig. 1 C). De momento, Traumatología desestima la intervención quirúrgica y la paciente continúa con tuberculostático.
A) Radiografías de rodilla derecha: se aprecia un aumento de partes blandas. B) TAC: se aprecia un aumento de grosor en la pared de íleon. C: gammagrafía ósea con tecnecio y galio; se aprecia un aumento de captación en la rodilla derecha. D: RMN; se aprecia un masa quística posterior al fémur.
La infección protésica por MT puede ser por una reactivación de un foco latente que llega a la articulación por vía hematógena o por reactivación local8,9. Los factores de riesgo para una infección protésica son: AR u otras condiciones inmunosupresoras, infecciones no articulares peri y postoperatorias, infección previa adyacente, cirugía previa de la misma articulación, cirugía prolongada, índice de masa corporal elevado, hematoma postoperatorio, edad avanzada y diabetes mellitus10. Los factores de riesgo para presentar infección protésica por MT son: edad avanzada (> 70 años), infección pasada por MT y condiciones inmunosupresoras5.
El tratamiento, por lo general, es médico y quirúrgico; se recomienda obtener muestras del tejido o el líquido previo a la antibioterapia; en caso de mala situación clínica, se recomienda iniciar vancomicina y cefepima11. La cirugía depende de: la etiología, el tiempo de presentación de la infección desde la implantación de la prótesis y las comorbilidades. Las opciones quirúrgicas son: recambio protésico (en uno o 2 tiempos [la más recomendada]), desbridamiento y retención de la prótesis y resección protésica en caso de no objetivarse una reimplantación adecuada11. Un estudio en pacientes con AR e infección protésica concluyó que el recambio protésico en 2 tiempos presentó mejor pronóstico12. La elección del tipo cirugía en la infección por MT es controversial por los pocos casos reportados6. Se recomienda de 6 a 9 meses de tratamiento para tuberculosis osteoarticular (2 meses con isoniazida, rifampicina, pirazinamida y etambutol, seguido de 4-7 meses de isoniazida y rifampicina)12, pero puede variar según las características y la evolución del paciente entre 6-24 meses11.
Esta paciente presenta una infección protésica secundaria a una infección tuberculosa, pero recomendamos, según la literatura, un tratamiento combinado: recambio protésico en 2 tiempos y tuberculostático con 4 fármacos un mínino de 6 meses.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.